Las travesuras de los niños sin duda alguna sacan risas a los adultos, por su puesto a su padres pero cuando estas habilidades pasan de nivel y estas ocurrencias salen de nivel.
Así fue cómo se viralizó este gracioso caso en el que un pequeño hace de las suyas y se queda con la limosna que tenía que echar a la canasta de la parroquia.
En las redes sociales se observa que una familia está celebrando una misa pero como parte del ritual que ya es común, cuando los religiosos acercan una canasta a los fieles para que quien lo desee otorgue una limosna o lo que llaman diezmo.
El niño finge tirar el dinero a la canasta, pero en el instante en el que monaguillo se aleja, con risas mira a su familia y les enseña que el dinero que sus padres le dieron para que diera a la iglesia en realidad lo dejó en sus manos.
Pero para que la acción fuera disimulada cambio de mano pasando el dinero de una a otra, y gracias a esto fingió que en realidad sí daba el dinero a la iglesia, pero en realidad ya se había quedado con todas las monedas.
Algunos pensarían que sería regañado por sus padres pero fue todo lo contrario, todos los integrantes de la familia comienzan a reírse y voltean a ver al pequeño quien no tiene más que poner cara de pícaro.
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